Ana José Varela. Nueva Directiva Financiera en la OCDE


Mujeres con poder. Ana Varela, Directiva en la OCDE

Es la primera vez que hay una directora financiera en la OCDE

Un foro internacional donde los países miembros debaten para mejorar su desarrollo económico y la calidad de vida de sus habitantes, ese es el trabajo que esconde la OCDE, un organismo a nivel mundial que cuenta con una gallega entre sus principales directivas

Durante una comida de trabajo y por casualidad. Así fue como Ana Varela (Bóveda-Lugo, 1970) se enteró de que era una pionera en su puesto en París: «Es la primera vez que hay una directora financiera en la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos)». Todo un reconocimiento a una extensa trayectoria que arrancó con la licenciatura en Derecho y Empresariales. Después llegó el turno para un MBA en la Universidad de Columbia, y una trayectoria profesional en la que pasó por The Boston Consulting Group, el Banco Popular, donde fue miembro del consejo de administración, y la Fundación Barrié. También fue presidenta de dos empresas, Torus Software Solutions y NasasBiotech, una start up de medicina. Todo un recorrido que no ha estado exento de reconocimientos, como no podía ser de otro modo. Entre ellos, ser una de las 25 mujeres elegidas en todo el mundo para formar parte del programa Women’s Leadership Program.

Una trayectoria de carácter internacional desde el inicio.

-Siempre me he considerado una persona muy inquieta intelectualmente y por eso incluso me costó elegir carrera, porque me gustaba todo. Me decanté por Derecho y Empresariales y decidí ya entonces completar mi formación fuera con los programas Erasmus. Empecé en The Boston Consulting Group e hice mi máster en la Universidad de Columbia, lo cual me ayudó a tener una visión global del mundo. Después tuve la oportunidad de volver a Galicia, con el Banco Pastor, donde pasado un tiempo me ofrecieron irme a la Fundación Barrié. Fue un proyecto precioso por la importancia que suponía para Galicia y para mi.

-Y entonces surgió la oportunidad de trabajar en la OCDE.

-Es una organización muy global, con clara vocación de aumentar el tamaño y el alcance de su actividad y que ha puesto el bienestar de la gente como el centro de su actividad. En concreto, dirijo el área económica y tengo a mi cargo de forma directa a cien personas, aunque hay otras cien que también están vinculadas. En total, son cinco divisiones a mi cargo, con gente de 25 nacionalidades diferentes. Es muy ilusionador y retador gestionar la parte económica.

¿Qué presupuesto manejan?

-La OCDE se financia a través de sus estados miembros, que aportan 375 millones de euros anuales. Gracias a otras fuentes se alcanzan los 500 millones. La elaboración del presupuesto es mi responsabilidad , así como el control de su ejecución.

-¿Cuántos trabajadores tienen?

-En total somos unas 3.500 personas en la organización.

Es la primera mujer en el puesto de directora financiera.

-Lo asumo con naturalidad, me enteré cuando ya estaba en el cargo y lo afronto con responsabilidad y mucha ilusión, poniendo todo mi esfuerzo y mi deseo de hacer las cosas bien. Siempre me guio mucho mi curiosidad y el valor del esfuerzo, inculcado por mi familia desde que era pequeña.

¿Cuáles son los objetivos de la organización?

-Hay unas prioridades estratégicas según los resultados que queremos obtener y en función de esto se dividen los presupuestos, que se hacen cada dos años. Aquí es distinto al sector privado porque las directrices se toman por consenso, hay que acomodar las diferentes voluntades de los países miembros. Esta es una organización muy conciliadora, global e inclusiva. Entre sus objetivos figura promover políticas que ayuden a mejorar el bienestar de la gente. Es un foro para que los países intercambien información y armonicen sus políticas para favorecer su crecimiento económico y la calidad de vida de sus ciudadanos.

«Hay que tener principios sólidos para afrontar las posibilidades del mundo digital»

Incansable y optimista, Varela apuesta por las nuevas generaciones, de las que destaca sus habilidades y conocimientos. «La sociedad tiene el reto de aprovecharlos mejor, de impulsar su creatividad, que será clave en el futuro».

Bajo su visión global, ¿cómo está la situación de la mujer?

-Soy positiva y creo que se ha avanzado mucho. Es necesario que haya más mujeres que sirvan como referentes y más gente que hable de ellas en los foros donde no tienen cabida. Creo que cada vez más las organizaciones comprenden mejor el valor de la diversidad, no solo de género, también de formación, cultura, raza o experiencia. Teniendo un equipo global se logra una visión más global.

-Imprescindible en un mundo globalizado y tan tecnológico.

-Creo que estamos viviendo una revolución que implica grandes cambios. La digitalización, el Internet de las cosas, todos los avances como los robots, impresoras 3D, drones o similares, implican grandes posibilidades pero también son necesarias nuevas habilidades y tener unos valores de referencia para afrontar estas situaciones. Hay que tener principios sólidos para afrontar las posibilidades del mundo digital.

-Además de su labor profesional, también participa como ponente en diferentes foros y fue elegida por la Anderson School of Management para el programa W50.

-Eleanor Roosevelt dijo que si cuando nace un niño su madre pudiera pedir a un hada un don, pediría curiosidad. Me fascina aprender y creo que es clave para afrontar la vida. Me encanta el arte, la historia, la posibilidades del mundo digital, soy una viajera y una lectora incansable y esto hace que me interese formarme siempre y que quiera involucrarme en muchos campos. El programa W50 me permitió estar siete semanas en Estados Unidos manteniendo encuentros en organismos e instituciones, aprendiendo, y conocer también la realidad de las otras 25 compañeras, de sectores muy variados. También colaboro siempre que puedo con programas de mentoras de Galicia y España. Creo que estas oportunidades sirven para que yo pueda ayudar, pero también son programas que retroalimentan porque yo recibo mucho.

Fuente: La Voz de Galicia – Mercados (14.05.2017)

Autor: L. Míguez